Conducir con Altas Temperaturas
5 consejos para conducir con altas temperaturas
No es nuevo, a nadie le produce asombro que las temperaturas suban de media un poco más cada año y tengamos veranos ligeramente más largos. Los estragos que la subida global de la temperatura por el cambio climático empiezan a notarse paulatinamente con el ascenso de los casos de incendios, el adelantamiento de las olas de calor con el consiguiente perjuicio para campos en floración que no aguantan muy bien las temperaturas más altas.
En el sector del transporte, conducir con altas temperaturas, es solo uno más de las decenas de desafíos a que se tienen que enfrentar los conductores de transporte terrestre. En este post te vamos a resumir los peligros que representa para todo el sector conducir con mucho calor o no descansar para hidratarse a lo largo del trayecto. Siempre es conveniente aportar una dosis de agua fresca para calmar la sed, bajar la temperatura y mantenerse alerta. También puedes tomar alguna bebida estimulante (si te sientan bien este tipo de bebidas) que contengan cafeína, teína o, incluso, taurina.
Peligro del calor para la conducción
Los peligros de conducir con calor son muchos y muy variados en cuanto a las consecuencias que pueden provocar. El primer desafío al que se enfrenta un conductor que tiene que conducir camiones en verano es el bochorno de las horas centrales del día que es muy difícil de paliar con aire acondicionado. El hecho es que la tractora de un camión produce algo muy parecido a un efecto invernadero leve. La configuración de este habitáculo hace que algunos rayos del sol no se reflejen y queden en el recinto, aumentando consecuente la temperatura y la sensación térmica.
La consecuencia más común de conducir con mucho calor es el sudor inmediato que aparecerá y que deberemos mantener a raya para evitar que entre por accidente en el ojo y nos quite segundos extra de visión de la calzada mientras secamos esta lágrima con un pañuelo. Si ves que el sudor puede plantearte un gran problema, puedes colocarte algo que evite que caiga al ojo como, por ejemplo, ponerte un pañuelo, cinta o banda antisudor. Si quieres una solución más rápida, puedes llevar cerca una pequeña toalla que haga las veces de cinta antisudor.
Las dos situaciones anteriores pueden provocar una consecuencia que es muy peligrosa para la conducción. Al eliminar sudor tras conducir con altas temperaturas durante un periodo determinado, no solo se elimina agua, también se exuda una parte de sodio que ayuda a mantener nuestras reservas hídricas en perfectas condiciones. La consecuencia tras sudar de manera copiosa es una bajada de tensión y sentir un cansancio o sopor. Se conoce al trastorno como cansancio por calor y puede derivar en mareos o golpes de calor, que ya serían situaciones más graves y representaría uno de los principales peligros de conducir con calor.
A continuación te daremos los consejos más útiles por si tienes que conducir con mucho calor, aunque ya hemos dado algunas pistas de por dónde irán esos consejos en los párrafos anteriores. Si te interesa cómo afecta el calor a la conducción, sigue leyendo.
Consejos para conducir con mucho calor
El primer consejo que te podemos dar cuando tengas que conducir con altas temperaturas es dedicar unos minutos a preparar una pequeña bolsa con recursos que hagan más soportable el calor. Lo primero es disponer de agua fría en todo momento (y de aire acondicionado, pero eso lo damos por descontado). Para ello puedes hacerte de una nevera de tamaño pequeño que puedas montar en el camión para llevar pastillas acumuladoras de frío y botellas congeladas. De esta manera a lo largo del día se irán descongelando y pasarán a estado líquido, pero seguirán conservando cierto grado de frescura para que te rebaje la temperatura.
Como hemos dicho en párrafos anteriores, no tiene por qué ser únicamente agua. Si te gusta el café, el té u otra bebida estimulante, ¡adelante con ella! Otro de los consejos para conducir con altas temperaturas, pasa por parar cada dos horas de conducción en algún área que tenga sombra. En ese momento puedes aprovechar para estirar las piernas, comer algo que contenga azúcar como una barrita energética o algo similar, también es buena opción una fruta. De esta manera recuperarás la atención y habrás bajado tu sensación térmica para continuar de nuevo con la ruta.
En tercer lugar, te recomendamos cubrirte si te preguntas cómo conducir un camión en verano. ¿Nunca te has preguntado por qué los bereberes del desierto llevan turbantes? La razón es sencilla pero muy práctica: cubrirse del sol. Adaptándolo a la cabina del camión, puedes hacerte de una buena gorra o cubrir con cortinas u otro instrumental homologado las zonas donde el sol te dé directamente, sobre todo se da esto al amanecer y al atardecer.
Si nada funciona y el calor es agobiante hay una última cosa que puedes hacer. Ya tenías una toalla pequeña para secar el sudor rápidamente y que no te caigan incómodas gotas en la cara que te desvíen la atención de la carretera durante fracciones de segundo. Puedes añadir una segunda toalla un poco más grande que puedas empapar y escurrir para ponérsela al cuello. Este es un método muy efectivo. Si por cualquier motivo, llevas el aire acondicionado descargado o tiene algún tipo de mal funcionamiento puntual, puedes hacerte con un pequeño ventilador que se conecta al usb y va con agua. No es gran cosa, pero consigue mover el aire de la cabina y bajar unos grados la temperatura.
Lo más importante al conducir camiones en verano es armarse de paciencia y en la medida de lo posible intentar alargar las hora de no conducción sobre todo en las horas centrales del día. Si nada de esto es posible, no quedará otra que ponerse manos al volante, sea cual sea la situación. Eso sí, atento a la fatiga, los bostezos, el cansancio provocado por la baja de tensión que puede provocar sudar en exceso y sobre todo paciencia: lo importante es llegar, no jugarse la piel por llegar.