¿Qué factores deben considerarse en el transporte de palés?

El palé tiene su origen en la segunda década del siglo XX y surgió como una herramienta que supuso un antes y un después para la logística en general, y para el ámbito del transporte de mercancías en particular. En este sentido no solo posibilitó el aumento del volumen de almacenamiento de las mercancías, sino también la disminución de los costes laborales debido a la reducción de los tiempos de carga y descarga. En este sentido, son varios los aspectos que influyen tanto en la selección como en el transporte de palés.

El tipo de palé y las dimensiones adecuadas

Existen diferentes tipos de palés, los cuales pueden clasificarse, por ejemplo, en función de sus medidas, y la elección de unas u otras dependerá del uso que tendrán tales herramientas en la cadena de suministro.

Uno de los más utilizados es el palé europeo o europalé, que pesa alrededor de 25 kg y tiene unas medidas de 1200 x 800 mm. Este suele utilizarse para productos de gran consumo y permite soportar cargas muy pesadas. Asimismo, otro de los palés más habituales es el palé americano o universal. Sus medidas son 1200 x 1000 mm, algo superiores a las del anterior, y soporta mercancías de mayor tamaño que el palé europeo, siendo una opción adecuada para el transporte de cargas líquidas. Aparte de estos dos tipos, también hay otro que tiene unas dimensiones de 1100 x 1100 mm y que se usa principalmente en Asia, el palé de dimensiones 1140 x 1140, utilizado en Australia, o el de 1016 x 1219 mm, empleado en Norteamérica.

El material del palé

En cuanto a los materiales con los que se fabrican los palés, la madera es el más habitual, como se ha mencionado antes. Este, además de resultar muy rentable, se puede reparar con facilidad y es también fácil de reciclar. No obstante, aunque la madera es el material más utilizado en este tipo de herramientas, el sector del transporte está en continua evolución, por lo que en el mercado también pueden encontrarse palés fabricados en metal, plástico o incluso cartón.

Estos dos últimos destacan por su ligereza y por las condiciones de higiene que ofrecen; además, y a pesar de que los palés de cartón son de un solo uso, destacan por ser reciclables y, en muchos casos, biodegradables, algo que resulta muy valioso hoy en día, puesto que cada vez se da más valor a las alternativas ecológicas. En cuanto a los palés de metal, estos están principalmente fabricados en acero o aluminio y, a pesar de su larga vida útil, su uso requiere de una mayor inversión por parte de las empresas.

No cabe duda de que en la selección de un material u otro influyen factores como la durabilidad o la higiene del palé en sí, pero también el tipo y el peso de la mercancía que se transporta, pues existen diferencias si se transportan, por ejemplo, productos sólidos o líquidos, mercancías peligrosas, etc.

A este respecto, existe la llamada normativa NIMF 15, unas normas internacionales de medidas fitosanitarias creadas en 2002 por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) con el objetivo de reglamentar el tratamiento y procedimientos necesarios para disminuir el riesgo de introducción de plagas en las mercancías con embalaje de madera.

La preparación y el embalaje de las mercancías

En definitiva, el transporte de mercancía paletizada es algo que tiene lugar de manera habitual. En ello, aparte de considerar aspectos mencionados anteriormente como los materiales, el tamaño o el tipo de mercancía que se transporta, es muy importante la manera en que los productos se colocan en los palés. En este sentido, los productos más voluminosos o pesados deben ir colocados en la base y seguidos de los más ligeros o de los que menos espacio ocupan.

Asimismo, para una distribución correcta y segura de las mercancías que se transportan, debe tenerse en cuenta, además, su lugar de origen y destino y el hecho de que estas vayan identificadas correctamente. En ello, es recomendable que la carga tenga las etiquetas adecuadas y que vaya acompañada de las instrucciones necesarias en caso de requerir un tratamiento especial por parte de los transportistas.

De manera adicional, y para la seguridad en su transporte, es conveniente recurrir a los elementos de sujeción y fijación adecuados que sean garantía de que el transporte se realiza con éxito y de que la carga llega a su destino en las condiciones adecuadas. El hecho de que, por ejemplo, los objetos colocados en los palés sobresalgan, suponen el riesgo de que se dañen.

La estiba es, en este sentido, un elemento muy significativo en el transporte de mercancías. Esta consiste en el emplazamiento y distribución adecuados de las mercancías en los vehículos de transporte, algo que repercute directamente en su seguridad, pues hay muchos accidentes que ocurren por no estar la carga bien sujeta y colocada en los vehículos de transporte.

A este respecto, el Real Decreto 563/2017, de 2 de junio, forma parte de la legislación para la estiba que recoge las disposiciones generales en torno a la importancia de realizar inspecciones en los vehículos que tranportan mercancías por carretera. El objetivo de dicho Reglamento es contribuir a la mejora de la seguridad en las vías de la Unión Europea, estableciendo controles más estrictos que certifiquen que los vehículos de transporte se atienen a la normativa vigente y que se encuentran, por consiguiente, en las condiciones adecuadas en materia tanto de seguridad como de protección del medio ambiente.

Con una estiba adecuada de la carga se puede lograr una reducción en el número de víctimas mortales en carretera así como de los riesgos ocasionados por las deficiencias tanto en los vehículos como en la disposición de las mercancías transportadas.

Ventajas del envío de palés para transportar mercancías

Como ya se ha mencionado, los palés son elementos esenciales en el sector de la logística y del transporte. Su uso trae consigo, entre otras, las siguientes ventajas:

• Automatización de procesos: las cargas paletizadas permiten reducir los tiempos de trabajo y disminuir los errores en la cadena de suministro. Asimismo, también se minimiza la manipulación de las mismas por los operarios.
• Protección e higiene en los productos: el transporte de mercancía paletizada permite evitar posibles roturas y daños y preservar los productos en las condiciones en las que salen del almacén, algo en lo que el cuidado y el mantenimiento de los palés repercute de manera directa.
• Larga vida útil: la resistencia de los materiales con los que se fabrican los palés hace que estos puedan utilizarse durante años, algo a lo que contribuye el correcto manejo de este tipo de herramientas por los profesionales encargados de su manipulación.
• Optimización del espacio y de los costes de transporte: la correcta colocación y facilidad de rotación de los palés contribuye a un transporte donde se aprovecha la capacidad máxima de los vehículos y se evitan recorridos innecesarios. En ello, como ejemplo, si se van a enviar cajas en palés, resulta recomendable apilarlas en columnas y distribuir el peso de manera uniforme para evitar posibles desperfectos.
• Posibilidad de reutilización y reciclaje: con la sostenibilidad en el punto de mira en la cadena logística, el uso de materiales reutilizables como la madera o el plástico en la fabricación de palés permite que este tipo de herramientas se reutilicen una vez hayan cumplido su ciclo funcional. En el caso de no poder reutilizarse, se opta por el reciclaje, lo que es una medida más en pro de la preservación del medio ambiente.

Transporte de palés y logística sostenible

La logística verde o logística sostenible es un concepto clave para el sector del transporte surgido de la necesidad de reducir el impacto medioambiental que suponen las emisiones de CO2. Esto conlleva una remodelación de los procesos empresariales y una adaptación de la cadena de suministro a las necesidades actuales, pero ¿cómo repercute la logística verde en el transporte de palés?

Uno de los principales aspectos es la minimización de las emisiones de dióxido de carbono asociada a la optimización del espacio en los vehículos de transporte de mercancías. La correcta distribución de los palés en los camiones permite aprovechar al máximo su capacidad y ahorrar trayectos adicionales que supongan una mayor contaminación atmosférica y un mayor consumo de tiempo.

Asimismo, el mantenimiento adecuado de las flotas también es importante para tener la seguridad de que estas se encuentran siempre en buen estado para operar con normalidad y sin que su uso repercuta de manera negativa en el medio ambiente. En este sentido, muchas empresas ya optan por recurrir a vehículos más sostenibles, que resultan menos contaminantes tanto a nivel de emisiones de CO2 como a nivel acústico.

Por otro lado, tal y como se ha indicado anteriormente, el uso de materiales reciclables hace posible la reutilización de los palés fabricados con ellos y, de esta manera, la reducción de los desechos sólidos generados así como de la cantidad de recursos materiales y de los costes para la fabricación de nuevos palés para transportar mercancías.